La Quietud del Viento sumerge a los jugadores en la conmovedora vida de Talma, una anciana solitaria que reside en un pueblo que alguna vez fue vibrante, ahora silenciado por el abandono. Con su familia reubicada en la ciudad, ella se encarga de sus quehaceres diarios, cuidando de las cabras, elaborando queso, recolectando huevos, cultivando verduras y atendiendo a sus mascotas. Ocasionalmente, un comerciante la visita, ofreciendo no solo suministros a cambio de su queso, sino también valiosas noticias sobre sus seres queridos. A los jugadores se les brinda la libertad de elegir las actividades de Talma, ya sea involucrándose en tareas del hogar, explorando el desierto circundante o expresando su creatividad a través del arte con arena, reflejando su existencia tranquila pero plena.